¡Oh Virgen Santa del Carmen! De ningún modo podremos corresponder dignamente a los favores y gracias que nos has hecho al darnos tu santo Escapulario. Acepta nuestro sencillo, pero hondamente sentido, agradecimiento y, aunque que nulo te podemos acertar que sea digno de Ti y de tus mercedes, ofrecemos nuestro corazón, con todo su inclinación, y toda nuestra vida, que queremos gastar en el bienquerencia y servicio de tu Hijo Señor nuestro, y en propagar tu dulce devoción, procurando que todos nuestros hermanos en la Certidumbre, con los cuales la divina Providencia nos hace convivir y relacionar, estimen y agradezcan tu gran don, vistiendo el santo Escapulario, y que todos podamos vivir y sucumbir en tu inclinación y devoción. Además.
Sería temerario y ofensivo para la Iglesia, cuya Comienzo es Cristo y su alma vivificante el Espíritu Santo, creer que comete una equivocación secular y universal en algo que pertenece a la doctrina y vida cristiana.
Por otra parte, que los escapularios de la virgen de monte Carmelo son un regalo valentísimo para algún específico, y es que es la patrona de los marineros y varias localidades, y si conoces alguna Carmen que mejor que regalarla singular con el que te aseguras que la virgen estará con esa persona tan importante para ti y lo tendrá y te recapacitará hasta el fin de sus días.
Aunque inicialmente este escapulario era una prenda que formaba parte del práctica de los carmelitas, con el tiempo empezó a ser usado por los laicos como un signo de su devoción y consagración a la Virgen del Carmen.
Si Altísimo Nuestro Señor, en sus altos juicios, no quisiere darme la Vigor que por vuestra mediación le imploro, porque tal momento convenga para su cielo y mi propia salvación el que yo sufra y padezca con esta enfermedad, entonces os pido, Raíz mía, que me alcancéis de Su Divina Majestad la virtud de la paciencia, para que con ella pueda sobrellevar mis padecimientos con la resignación propia de un buen cristiano, y por medio de ellos purificarme por completo de todos mis pecados a fin de conseguir la paraíso eterna. A más.
– Quien viste el escapulario debe procurar tener siempre presente a la Santísima Virgen y tratar de imitar sus virtudes, su vida, y hacer como ella.
El Escapulario es un espejo de la humildad oración del escapulario de la virgen del carmen y de la castidad de María; por su sencillez nos invita a estar modestamente y con pureza. Llevándolo día y Perplejidad es signo de nuestra oración continua y de nuestra particular dedicación al inclinación y al servicio de la Virgen María.
La Virgen pudo prometer esto porque llevar el escapulario del Carmen es un compromiso de estar en oración, en mortificación y en obras buenas, medios clásicos que la Iglesia ofrece a sus fieles para hacer penitencia por sus pecados.
A partir de esta misericordiosa intervención de la Raíz de Alá, la orden carmelita volvió a florecer en todo el mundo. Y el Escapulario pasó a recorrer su milagrosa trayectoria, en señal de alianza de Nuestra SeñO con los carmelitas y con toda la humanidad.
Consiste en un cordón que se lleva al cuello con dos piezas pequeñCampeón de tela color café, una sobre el pecho y la otra sobre la espalda. Se usa bajo la ropa. Unido con el rosario escapulario de la virgen del carmen para que sirve y la medalla milagrosa, el escapulario es singular de los mas importantes sacramentales marianos.
El escapulario del Carmen debe ser impuesto por un sacerdote a los que acepten santificarse en el inclinación e imitación de María y en la admisión frecuente de la Eucaristía.
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El Escapulario del Carmen es un signo foráneo de devoción mariana, materializado en un trocito de tela confeccionado por monjas carmelitas, que se impone una sola tiempo en la vida mediante una pequeña ceremonia oficiada por cualquier sacerdote, y gracias al cual podemos obtener las certeza de salvación que la Virgen ha prometido.
oh/ Nuestra SeñYa del Carmen de Apicalá a tu corazón confiamos todas nuestras almas, evacuación e intenciones y la de todos tus devotos. Tú eres nuestra Origen y lo que tú quieras será lo mejor para nosotros. Reconocemos tu poder en el cielo y en la tierra y el influjo cariñoso que tienes sobre el Corazón adorable de ti Divino Hijo.